Con este disco, Roger Taylor consiguió reunir un fuerte grupo de canciones desde su ultimo trabajo 'Strange Frontier' de 1984. Produce un sonido rock con más componentes electrónicos añadidos, con lo que consigue sonar más actual, pero sin llegar al ridículo como otros artistas de su generación. Tambien desaparece el almibar 'baladoso' de su anterior trabajo. ¿Puntos memorables?, pues por ejemplo el tema 'Surrender', un dueto potente acerca de matrimonios decrepitos y abusos conyugales. Canciones como 'Pressure on' y 'The Whisperers' tienen un ondo caracter reflexivo. Respecto a las letras, Taylor sigue mostrando sus defectos, pero como la música esta a una altura notable, el problema queda minimizado.